Volvemos y lo hacemos con ganas renovadas ante los complicados retos que tenemos por delante. Lo principal y lo más concreto en este año será completar el proceso de estabilización del empleo con la resolución del concurso. Una tarea que no será fácil pero en la que pondremos todo nuestro empeño para lograr que se queden con nosotros todos esos compañeros que llevan años en situación de inestabilidad laboral, que para eso se hizo este proceso. Satisfechos con el logro de que se reconocieran todas las plazas que pactamos con la empresa, gracias a la convocatoria de huelga que sustentó la Agrupación de Trabajadores junto a CCOO y el SPA, ahora hay que completar el proceso. Contamos con varios hándicaps en unas bases que nosotros no votamos favorablemente por, fundamentalmente, reservar el 10% de plazas para personas con discapacidad algo que, a nuestro entender, no casa con un proceso extraordinario de estabilización. Intentaremos minimizar esos perniciosos efectos. Nuestra abstención, en todo caso, nos permite reservarnos la opción de recurrir si lo consideramos necesario.
Pero este año también plantea un reto importante: reactivar el Comité Intercentros y lograr que sea un auténtico órgano de defensa de los trabajadores y que refleje el sentir de TODOS ellos, nunca servir de instrumento para los intereses de un sindicato ni de una persona en concreto. Las decisiones tomadas en el seno de este órgano deben ser reflejo de la mayoría y, dado que nadie tiene mayoría, de un proceso de diálogo leal y sincero. Es fácil de entender pero no de ejecutar. La tentación es grande.