El Comité de Empresa en Cádiz ha cambiado de forma que el cargo de secretaria, que ostentaba Isabel Gorriño, de UGT, pasa a ocuparlo Kati Sánchez, de la Agrupación de Trabajadores, y el delegado de prevención que ocupaba el compañero de UGT, Luis Quevedo, ahora jubilado parcial, pasará a ocuparlo Luis López-Bellido, de CCOO. Desde la Agrupación de Trabajadores queremos agradecerles a los compañeros salientes el trabajo realizado. Entendemos que se abre una nueva etapa que puede ser muy fructífera para el trabajo que desempeñamos.
Estos cambios son fruto de las necesidades puntuales de la delegación de Cádiz y nada tienen que ver con el cambio en el Comité Intercentros y el de Sevilla, pues habrían coincidido en el tiempo. No tiene que ver con ninguna huelga ni ninguna negociación, como quiere hacer ver UGT. Este sindicato se equivocó cuando pasó de apoyar la huelga de montadores a descolgarse, sorpresivamente y sin más explicación, en poco más de media hora. El éxito de la huelga fue de quienes la respaldamos, no de quienes dejaron tirado a un colectivo que estaba unido. Y UGT miente. Miente cuando presume de negociación. Mienten porque negociar para muchos no es pastelear para unos pocos. Y eso es lo que está haciendo UGT desde hace ya muchos meses. Pedir beneficios para los suyos. Solo tenéis que mirar a vuestro alrededor y veréis, a vuestro lado, a beneficiados particulares de sus “negociaciones”. Sabéis quienes son. UGT vende para su beneficio a colectivos enteros, como ocurrió con los montadores, o como ocurrió con los interinos. Dos huelgas en los últimos tiempos, dos descuelgues y, entre vosotros, el rastro que dejan sus “negociaciones”.